Nota 9
El Lamborghini Aventador fue presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra del año 2011 como el sucesor del Lamborghini Murciélago. Al igual que ocurre con el resto de modelos de la casa de Ferruccio Lamborghini, el nombre del coche está directamente relacionado con el mundo de la tauromaquia.
El 'Aventador' fue un prestigioso toro de lidia que participó en una corrida en la Plaza de Toros de Zaragoza en el año 1993 y que recibió un premio en honor a su valentía.
La cara exterior del Aventador LP700-4 recibe la influencia en sus líneas del Lamborghini Reventon, un exclusivo concept de la firma italiana presentado en el año 2007, del que sólo se fabricaron 20 unidades. El superdeportivo de los de Sant’Agata tiene 4,78 metros de largo, 1,14 metros de alto y unos llamativos 2,26 metros de ancho conseguido gracias a un generoso ancho de vías trasero.
Las puertas se abren en forma de tijera, del mismo modo que el resto de modelos V12 desde la época del Lamborghini Countach. Sobre la zaga destaca un imponente difusor y una llamativa salida de escape de forma hexagonal. Lamborghini ofrece una paleta de trece tonalidades para la carrocería del Aventador LP700-4.
El interior encontramos una consola central que monta una botonera propia de un avión de combate. Existen diferentes posibilidades de personalización del habitáculo. Aún así Lamborghini ofrece a sus clientes un programa denominado 'Ad Personam' a través del cual los compradores podrán diseñar el look del interior según sus gustos y preferencias.
De serie encontramos dos pantallas LED sobre el tablero de instrumentos y la consola central. La segunda ofrece toda la información relacionada con el sistema de infoentretenimiento y el navegador, entre otras opciones.
A nivel mecánico el Lamborghini Aventador LP700-4 monta un motor V12 de 6.5 litros que genera la friolera de 700 CV a 8.250 rpm y un par máximo de 690 Nm a 5.500 vueltas. El tradicional propulsor V12 empleado por el fabricante recibe una puesta a punto para reducir su peso hasta los 235 kilogramos.
La actualización también afecta a los consumos que se reducen hasta en un 8% respecto a los que se atribuye su antecesor, el Lamborghini Murciélago. Una caja de cambios manual robotizada denominada 'ISR' (Independent Shifting Rods) de siete velocidades con levas en el volante se encarga de transmitir toda la potencia a las cuatro ruedas.
La marca italiana Lamborghini defiende que esta opción es la más acertada por trabajar igual de rápido que una caja de doble embrague y además ser más ligera. La tracción total es de tipo 'Haldex' y trabaja junto a un diferencial trasero de deslizamiento limitado y un diferencial delantero gestionado por el control de estabilidad (ESP).
Desde el interior podemos seleccionar tres modos de conducción diferentes: 'Strada', 'Sport' y 'Corsa'. Según la opción escogida el conductor recibira una diferente respuesta del motor, la transmisión, el diferencial, la dirección y la gestión electrónica.
Por su parte, Lamborghini afirma que el Aventador LP700-4 es capaz de acelerar desde parado hasta los 100 km/h en 2,9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 350 km/h. Un arma digna de disfrutar en circuito.
Su peso en vacío, gracias al empleo de fibra de carbono reforzada (CFRP) en diferentes zonas del coche, se fija en 1.575 kilogramos. Esto da como resultado una excelente relación entre peso y potencia de 2,25 kg/CV. Un factor a tener en cuenta pero que seguramente no preocupe en absoluto a los propietarios del Aventador LP700-4 es el gasto de combustible de 17,2 litros a los cien kilómetros.
La aerodinámica es otro de los aspectos más trabajados del coche. De esta manera, se han instalado varios elementos móviles sobre las carrocería como un alerón trasero desplegable o unas entradas de aire con apertura automática. Estas son algunas de las curiosidades que presenta este modelo.
Este toro italiano se asienta sobre un chasis monocasco fabricado en fibra de carbono reforzado con varios elementos de aluminio sobre el subchasis delantero y trasero, las puertas y el capó. Los ingenieros de Lamborghini se han inspirado en la Fórmula 1 para el diseño de la suspensión del Aventador LP700-4, de tipo 'pushrod'.
Para tratar de hacer más llevadera su conducción por terreno urbano, Lamborghini ha instalado un botón accionable desde al habitáculo que permite al coche alzarse hasta cuatro centímetros para poder sortear badenes. Los discos de freno empleados son carbocerámicos, puesto que son mucho más ligeros que unos convencionales y también resisten mejor las altas temperaturas a las que pueden llegar a ser sometidos si se buscan los límites del coche.
Los discos delanteros tiene 400 mm de diámetro y seis pistones y los traseros 380 mm y cuatro pistones. El precio de venta de este Lamborghini parte de los 340.000 euros, impuestos incluidos.