Jaecoo 7: probamos un nuevo SUV que llega sin ningún complejo. Y con razón
Jaecoo es la marca hermana de Omoda. El nuevo modelo, denominado 7, llega como SUV compacto solvente y dos modos de tracción.
Aunque no lo creas, la del Jaecoo 7 es una de las pruebas que más interés tenía en hacer en esta última parte del año. Y es que su primo el Omoda 5 ha sido un éxito de ventas, por lo que tenía ganas de ver si desde el Grupo Chery al que pertenecen estos dos modelos han sabido repetir la receta.
Así, a grandes rasgos te diría que sí. Encuentro al Jaecoo 7 como un modelo bastante maduro, con un precio interesante y más luces que sombras, lo que en ocasiones, al hablar de marchas chinas de reciente creación, es mucho decir.
Este modelo mide 4,5 metros, por lo que se encuadra dentro del segmento C-SUV, uno de los más demandados en la actualidad, y también de los más difíciles: aquí encuentras desde veteranos tan solventes como el Seat Ateca hasta modelos con sistemas híbridos a la última como el Nissan Qashqai, aunque es cierto que quedan pocos que puedan ser 4x4 como este.
En esta ocasión te voy a hablar de un modelo que llega con una variante de gasolina y etiqueta C, aunque creo que el plato fuerte va a llegar el año que viene, cuando desembarque un híbrido enchufable con cifras más que interesantes y un precio similar al de este si se le aplican las ayudas del MOVES III.
Un motor 1.6 que comparte con Omoda
En este caso, bajo el capó descansa un cuatro cilindros turbo de 1.598 cc. Se trata de un bloque que comparte con el Omoda 5 que se va a vender desde 2025. En este sentido, creo que vale la pena recordar que hasta ahora ofrecía 185 CV, aunque la normativa antiemisiones ha obligado a quitarle un poco de chispa.
¿El resultado? No te voy a negar que es bastante descafeinado, aunque a eso vamos a llegar dentro de un momento. Por ahora me voy a quedar con las cifras de potencia, par y consumo.
El Jaecoo 7 va a llegar a España como modelo 4x2 y como variante 4x4, que es la que yo he probado. En ambos casos hablamos de 145 CV y 275 Nm y sus precios son de 33.900 euros para el tracción delantera y 37.900 para el integral, aunque hay un descuento de 2.000 euros para el primero y de 3.000 para el segundo.
En marcha, suave y sin excesos

Esta primera prueba la he realizado por las carreteras de los alrededores de Madrid, circulado por algo de zona urbana (muy poco), autopista y carreteras convencionales.
En líneas generales se puede decir que es un coche que cumple con lo que promete: un buen agrado de conducción, insonorización más que decente (cristal doble en la parte delantera) y unos valores NVH bastante contenidos.
Los primeros kilómetros en zona urbana me sirven para acomodarme. Unos buenos asientos delanteros me recogen bien la espalda y los muslos y la postura de conducción es relajada.
Aunque tiene una luneta trasera pequeña, su visibilidad está bien, un punto a favor en este tipo de entorno. También es muy suave, lo que también se suma a sus puntos fuertes.
En autopista y carreteras secundarias encuentro que la dirección es muy poco comunicativa y demasiado suave, incluso en modo Sport. Aquí me recuerda un poco a la que me encontré durante la prueba del BYD Seal U: tiene tan poco feeling que las trazadas no son limpias del todo y me hubiera encantado una mayor asistencia.
También pienso que el motor es demasiado suave: sí que se muestra alegre, con ganas de trabajar y se lleva de maravilla con la caja DCT de siete velocidades firmada por Getrag, pero al final la tracción integral y todo el equipamiento que lleva son kilos que se añaden al dato final, pendiente de homologación, pero que estará por encima de los 1.500 kilos.
Y hasta aquí lo más negativo que me he encontrado, lo que no deja de ser llamativo para un coche tan nuevo en todos los sentidos como este.
También podrías hacer algo de campo
Una de las curiosidades de este modelo es que en la marca hacen hincapié en que el Jaecoo 7 4x4 es válido para hacer salidas fuera de carretera. Como podrás imaginar, no es un modelo que pueda salir airoso del camino más complicado por neumáticos, cotas o sistema de tracción.
Pero sí que gracias a su tracción integral puedes aventurarte por zonas complicadas y sacar partido a la tracción integral. Tiene cuatro modos específicos: barro, nieve, arena y uno general todoterreno, que se unen a los típicos Eco, Normal y Sport.
Aquí le veo algunas debilidades. Para empezar, el control de descenso para el coche a 10 km/h, pero esa es una velocidad muy alta en bajadas en campo y quizá demasiado lenta carreteras nevadas: estaría bien que se pudiera regular de algún modo.
La principal, en todo caso, es que cuando el coche se queda atascado, en lugar de seguir girando las ruedas para intentar engancharse al camino y recobrar tracción, para la entrega de par para proteger el sistema. Resultado: tendrás que dar marcha atrás, algo que en campo a veces puede ser un verdadero infierno...
Pero más allá de eso, también tiene virtudes, como un sistema autoblocante bastante inmediato. También, a la hora de "retorcerse" en zonas complicadas, apenas cruje, lo que te da una pista de que está bien ensamblado.
Un interior con luces y alguna sombra

En la parte buena, el espacio interior, tanto en las plazas delanteras como en las traseras. Empiezo por las delanteras: los asientos tienen regulación eléctrica, aunque solo el del conductor se ajusta en altura... y en compás; es decir, solo se sube la parte de atrás del asiento. Esto es mejorable, pues al subirlo te cambia la inclinación de la banqueta y la postura de conducción.
Al volante llegas a todos los mandos... que en realidad no son tantos: una pequeña botonera a la izquierda del volante y la pantalla central, que en caso del 4x4 es de 14,8 pulgadas.
Funciona muy bien gracias al uso de un chip Snapdragon que es todo un acierto porque tiene una rapidez de respuesta muy buena.
En la parte menos positiva, todo se controla desde el panel, climatizador incluido, por lo que vas a tener que estar mirando y tocando la pantalla para casi cualquier cosa que necesites. Quizá una actualización en la que se quede una barra de control fina estaría bien. A cambio, la lógica de menús no tiene demasiada complicación, quizá gracias a la colaboración con Xiaomi en este apartado.
Quizá sentado al volante es donde se aprecian algunos detalles que deberían mejorar, como es el uso de algunos plásticos simplones o ajustes mejorables (por ejemplo en la guantera), aunque de esta prueba me llevo la sensación de que el Jaecoo 7 es un coche bien hecho y honesto.
En cuanto a las plazas traseras, me parecen muy buenas. El acceso no está mal y las puertas se abren bastante (no llega al nivel del Qashqai) por lo que pasas con facilidad.
Dentro, aunque la línea de cintura queda elevada, la postura de asiento es buena, el mullido cómodo y cuentas con reposabrazos central y huecos para dejar cosas, así como una salida de aireación central que siempre viene bien.
Conclusión: no tiene por qué salir mal
Termino los primeros kilómetros con buen sabor de boca y con ganas de probarlo por mis recorridos habituales de prueba. Tengo la sensación de que podría ser un (relativo) éxito de ventas parecido al de Omoda, que sin historia y conocimiento de marca, ha logrado 4.944 matriculaciones en lo que va de año por encima de nombres como Honda y al nivel de Suzuki (5.008).
En Jaecoo me dicen que los coches tienen una garantía de tres años o 150.000 km, lo cual ya es una buena señal. Además, cuentan con un almacén logístico en España, una disponibilidad del 97% de piezas en 24 horas y este 2024 cerrarán con más de 90 centros de servicio y ventas, lo que da una idea de la seriedad del proyecto.
Por eso, si alguien prefiere un Jaecoo 7 por delante de un Nissan Qashqai, un MG HS o un Seat Ateca, no habrá optado por una opción rara y arriesgada. Quizá con el tiempo se normalice esta marca en el mercado, y entonces sus ventas crecerán a buen ritmo, con razón.
Conoce cómo trabajamos en Autobild.
Etiquetas: SUV, SUV compacto