No a la venta (antiguo)
Nota 7
El Dongfeng iX5 es el segundo modelo que la marca china comercializa en España, tras el DFSK 580. Al contrario que este, un todocamino de siete plazas, el nuevo SUV tiene unas dimensiones ligeramente más contenidas, pero sobre todo se diferencia por una imagen más estilizada y deportiva.
El DSFK iX5 sport suv ofrece una combinación de tamaño más que generoso (ide 4.685 mm de largo, 1.865 mm de ancho y 1.645 mm de alto, ofreciendo una distancia entre ejes de 2.790 mm) con una silueta de estilo coupé.
El frontal es la zona más llamativa gracias a una parrilla de grandes dimensiones que tiene como protagonista el logo y tira líneas de fuga a modo de puntos cromados. Los grupos ópticos delanteros son bastante anchos y están cruzados por una barra que actúa como luz diurna, el paragolpes presenta dos faros antiniebla, unidos por una barra cromada, y una defensa inferior de plástico.
Dicha protección se extiendo por los pasos de rueda, los faldones laterales y el difusor trasero, donde suma un refuerzo de aluminio y aloja sendas salidas de escape. En la vista lateral se aprecia claramente la línea de cintura, que parte del capó y baja hacia el paso de rueda trasero, que luce otra línea de tensión que se alarga hasta los pilotos traseros. Las ventanillas cuentan con un marco cromado y una forma afilada que estiliza el pilar C, rematado a su vez por un pequeño alerón.
El interior del DSFK iX5 ofrece 880 mm de espacio para las piernas en las plazas traseras, 870 mm de altura y un maletero que cubica 379 litros y que se amplían hasta los 1.420 si se abaten los asientos traseros, formando de paso una superficie de carga plana. Además, muestra claramente el carácter premium que la marca quiere imprimir a sus vehículos, lo que motiva que solo esté disponible con un nivel de acabado, denominado Luxury, que incluye tapicería de cuero, un cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas configurable en tres modos (Clásico, Deportivo y Tecnológico) y una consola central que cuenta con dos pantallas (la superior para utilizar el sistema de infoentretenimiento y la inferior para los controles de climatización).
La dotación se complementa con calefacción y regulación eléctrica para los asientos delanteros (10 vías para el piloto, cuatro para el copiloto), luz de ambiente, superficie de carga inalámbrica para el smartphone, equipo de sonido premium Pioneer, sistema de infoentretenimiento inteligente Lin OS 4.0, cámara de aparcamiento de 360 grados con 3D y una aplicación móvil para controlar diversas funciones a distancia, como son arrancar el motor, desbloquear las puertas, programar rutas de navegación, etc.
El iX5, por el momento, solo está disponible con un motor de origen Mitsubishi. Se trata de un bloque 1.5 turbo de cuatro cilindros que desarrolla 150 CV y 200 Nm de par máximo. Se comercializa en dos versiones, una de gasolina y una bifuel de gasolina/GLP (Gas Licuado Petróleo), cumpliendo esta última con los requisitos para conseguir la etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico.
Se combina con una caja de cambios automática tipo CVT y con un sistema de tracción delantera. No se ha revelado su aceleración de 0 a 100 km/h pero sí que su velocidad máxima es de 160 km/h, que homologa un consumo de 7,5 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 212 g/km (ambos datos referentes al motor usando solo gasolina). Cuenta con un selector de modos de conducción con cuatro opciones (Normal, Sport, Eco o Winter) a las que se suman otras tres para la dirección eléctrica (Normal, Confort o Sport).
DFSK también ha confirmado que más adelante el SUV recibirá una variante superior con un motor de 174 CV, aunque no ha dado más datos al respecto.
El precio en España del DSFK iX5 es de 28.500 euros, lo cual supone una cuantía bastante ajustada si se tiene en cuenta su carácter premium y el segmento al que pertenece. Además, es posible rebajar todavía más la tarifa, puesto que si financia con la marca se puede adquirir desde 26.500 euros.
Las opiniones sobre el DSFK iX5 son positivas, viéndolo como un modelo que puede servir de entrada a aquellos clientes que busquen adentrarse en el segmento premium por un precio que no sea excesivamente alto. Además, la marca está muy segura de la fiabilidad de su modelo, ofreciendo de serie una garantía de cuatro años que, de manera opcional, se puede ampliar hasta los siete o hasta que se recorran 100.000 kilómetros con él.
El Dongfeng DSFK iX5 es un vehículo peculiar en cuanto a concepto, puesto que combina unas dimensiones más que generosas con un estilo de carrocería coupé, debido a la caída del techo. Esto hace que, si bien compita contra la mayoría de SUV grandes premium del mercado, sus contrincantes principales sean aquellos que presentan una silueta similar, algo que no abunda.
Así, posiblemente el BMW X4 sea su rival más directo. Es ligeramente más largo, ancho y bajo que el todocamino chino, y tiene una mayor distancia entre ejes. Sin embargo, es fácil encontrar similitudes en la manera en la que cae el techo en la zaga, aunque en conjunto su estética, gracias al poderoso frontal, es más contundente y menos estilizada.
Otros en la lista podrían ser el Alfa Romeo Stelvio, con una silueta también bastante atlética; el Mercedes GLC, aunque la variante Coupé es ligeramente más larga; el Nissan X-Trail, por tamaño, aunque no por formato de carrocería; el Volvo XC60 o el Porsche Macan, aunque ambos con unos precios muy superiores.